69:6 Los aditas fueron aniquilados por un viento glacial, impetuoso,
65:8 ¡A cuántas ciudades, que desdeñaron la orden de su Señor y de Sus enviados, pedimos cuenta rigurosa e infligimos un castigo horroroso!
7:166 Y, cuando desatendieron las prohibiciones, les dijimos: «¡Convertíos en monos repugnantes!»
67:21 O ¿quien es el que os proveería de sustento si Él interrumpiera Su sustento? Sí, persisten en su insolencia y aversión.
25:21 Los que no cuentan con encontrarnos, dicen: «¿Por qué no se nos han enviado de lo alto ángeles o por qué no vemos a nuestro Señor?» Fueron altivos en sus adentros y se insolentaron sobremanera.
19:69 Luego, hemos de arrancar de cada grupo a aquéllos que se hayan mostrado más rebeldes al Compasivo.
19:8 «¡Señor!» dijo «¿Cómo puedo tener un muchacho, siendo mi mujer estéril y yo un viejo decrépito?»
51:44 Pero infringieron la orden de su Señor y les sorprendió el Rayo, viéndolo venir.
7:77 Y desjarretaron la camella e infringieron la orden de su Señor, diciendo: «¡Salih! ¡Tráenos aquello con que nos amenazas, si de verdad eres de los enviados!»